Al comienzo de un nuevo Año litúrgico,
inmersos ya en el tiempo de Adviento y próximos los días entrañables en que
conmemoramos el Nacimiento en Belén de nuestro Salvador, quiero aprovechar la
oportunidad que nos brinda nuestra página web, para expresar en nombre de la
Junta de Gobierno de la Hermandad y en el mío propio, a todos los hermanos y
devotos, a sus familiares y amigos y a cuantos nos visiten a través de este
medio de comunicación, nuestros deseos más sinceros de paz y felicidad en estas
fiestas de la Navidad y que la alegría, la esperanza y la concordia que nos
trae el Niño Dios que nace, se prolongue a lo largo de todo el año 2015.
Vivimos tiempos difíciles por diversas
circunstancias, económicas, sociales, laborales, etc., por ello se hace más
necesario que nunca que las hermandades sean fieles a sus principios, que
desarrollen al máximo sus preceptos, esos tres pilares fundamentales para su
razón de ser: culto, caridad y confraternidad.
Como cristianos, debemos buscar el mayor
conocimiento del mensaje de Cristo, de su Evangelio, porque en la Palabra de
Dios podemos encontrar la solución a todos los problemas. Pero de nada sirve
amar a Dios sobre todas las cosas si no amamos a nuestros hermanos, si hacemos
oídos sordos al necesitado, si no practicamos la caridad y no sólo la material,
también es necesaria la ayuda moral y espiritual y que ninguna cuestión
de criterio personal haga distanciarse a los hermanos, que ningún tipo de
prejuicio rompa el principio de hermandad.
Reiterando mis deseos de paz y prosperidad
os envío un fraternal abrazo en Nuestro Padre Jesús de los Afligidos y Nuestra
Señora Reina del Cielo y Misericordia.
“Paz y Felicidad en esta Navidad y en el
Nuevo Año”
Rafael Herrador Pérez
Hermano Mayor